La disciplina del football bikini es más emocionante de lo
que creen las jugadoras, los empresarios que lo organizan, y más de lo que
creen los fans. Por eso quiero investigarlo.
Me explico.
¿Qué has perdido a causa de los prejuicios?
Los
prejuicios nos hacen perder
En noviembre de 2015 el entonces presidente municipal de San
Andrés Cholula, Leoncio Paisano Arias, canceló sin argumentos el partido de
football bikini entre los equipos Mambas Negras y Friki Dolls, en la liga Pretty
Girl Football League (1).
Unas horas antes del encuentro en las instalaciones del
Deportivo Quetzalcóatl, rentadas por el equipo, se les comunicó a los equipos
que se cancelaba el prestamos de las instalaciones.
Notificado sólo unas horas antes de que empezara el juego,
el equipo anfitrión, las Mambas Negras, tuvieron que conseguir otro espacio en
los campos deportivos de Chivas Santuario, donde llevaron a cabo el encuentro,
ante el disgusto del equipo visitante, proveniente de Guadalajara, lo que
provocó la cancelación de 23 de los 27 patrocinadores que tenían negociados en
el encuentro, lo que trajo como consecuencia pérdidas económicas.
No hubo ningún argumento para cancelar el evento.
La causa, fue que la regidora Dolores Gabiño consideró
“inmoral” el espectáculo, y solicitó que se suspendieran los permisos para
llevar a cabo el encuentro que ya estaba pactado como parte de la Pretty Girl
Football League.
Paulina Vidal, manager del equipo Mambas Negras, explicó que
el viernes recibió una llamada de última hora por parte del gobierno de Leoncio
Paisano para informales que no podían llevar a cabo el encuentro a sólo unas
horas del juego.
La actividad se canceló sólo porque lo ordenó alguien con autoridad
para hacerlo. No por alguna razón. Sólo por las creencias de la autoridad.
Esto es lo que puede pasar cuando las autoridades actúan
conforme a sus prejuicios que llaman morales.
¿Sabe de algún otro ejemplo como este, en el que una
autoridad actúa sin dar razones, sólo respondiendo a sus particulares creencias?
Prejuicios
Prejuicios son las creencias que no examinamos.
Para convertir las creencias en información hay que
investigar. Por eso es tan difícil perder los prejuicios.
Creemos que lo que creemos es verdad. Pero es verdad sólo cuando
investigamos, sólo cuando las comprobamos. No son verdad sólo porque las creemos.
Es fácil sólo tener creencias. Es fácil sólo seguir creyendo
lo que se cree.
Perder prejuicios y ganar verdades es difícil. Rudísimo.
Y apenas
ayer…
El 6 de septiembre de 2019, hace sólo 3 semanas, Breckynn
Willis, nadadora de 17 años de Alasaka, fue descalificada de una competencia,
anulando su triunfo.
Porque durante una competencia su traje de baño dejó al
descubierto una parte de la zona de la nalga.
La Asociación de Actividades Escolares de Alaska (Alaska School
Activities Association) exige que el traje de baño cubra por completo la zona
de la nalga. Un juez vio que el traje se había movido descubriendo una parte. La
nadadora ganó el heat, pero el juez la descalificó por romper las llamadas
reglas de modestia (3).
Muchos nadadores y coaches creen que la regla no es nada
clara. Cliff Murray, coach de natación dijo al Anchorage Daily News que a ellos
se les indica que “los trajes no deben mostrar ninguna parte de la zona del
glúteo”. En caso de que algún traje disguste o incomode a un juez, entonces
este debe ir con el coach y pedirle que “arregle” a la competidora.
El juez no lo hizo, pero en base a su incomodidad
descalificó a la competidora.
Lauren Langford, también coach de natación en la West High School
en Anchorage, donde compite Breckynn Willis, declara que no se castiga la
inmodestia sino la apariencia distinta de unas nadadoras: “Las competidoras no
son castigadas por usar su traje de manera escandalosa. Son castigadas por sus
caderas más anchas, por sus pechos más grandes, y en general por tener una
complexión que es distinta de las de las competidoras más pálidas”.
Breckynn Willis es de raza mixta.
“Esto se ve con claridad cuando las competidoras blancas
cometen faltas similares, pero no son señaladas de ninguna manera”, termina la
coach Langford.
El caso de
la nadadora es más complicado
La coach Langford señala algo más grave en el caso.
“Hay madres que exigen que las chicas se vistan de otra
manera porque, dicen, hacen que sus hijos las volteen a ver. Las madres exigen
que las nadadoras se cubran para proteger a los chicos”.
¿Te suena familiar?
La coach Langford termina señalando el costo moral para la
joven nadadora: “a la chica le rompe el corazón que crean que usó el traje, que
usó su cuerpo para llamar la atención”.
¿Te suena familiar?
Los prejuicios sobre el cuerpo femenino nos afectan en el
deporte, y sin duda fuera de él.
Por eso hay que hablar de esto.
¿Autoridades
morales?
No pasan cosas buenas cuando las autoridades se toman
atribuciones morales.
Pero desgraciadamente es muy común.
En México, el presidente López Obrador ha declarado que las
iglesias deberían tener canales de televisión para “moralizar” al país:
"Si es para moralizar, en el sentido amplio y profundo
del concepto, dar facilidades (...) Buscar la forma de facilitar la libre
manifestación de las ideas y no prohibir lo que pueda ayudar en el
fortalecimiento de los valores culturales, morales y espirituales", dijo
en su conferencia de prensa (4).
En febrero, pastores cristianos evangélicos pidieron al
presidente Andrés Manuel López Obrador acceso a los medios masivos de
comunicación para dar a conocer su mensaje. El presidente agregó que el
Gobierno busca la felicidad del pueblo, que también engloba la moral de la
población, "el bienestar del alma".
Según informó Farela Gutiérrez, López Obrador instruyó tanto
a la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, como a quien entonces era
subsecretario de esa dependencia, Zoé Robledo, a hablar del marco legal en el
que podrían participar en los medios masivos.
Es una pésima, pésima idea.
Porque las autoridades nunca, nunca revisan, critican, o
dudan de sus creencias.
Porque las autoridades sólo defienden sus prejuicios. Y como
son autoridad, los imponen.
Y el
football bikini…
La disciplina del football bikini es más importante de lo
que parece.
Es importante porque es valioso para las jugadoras.
Es importante por que es un motivo de fomentar la cultura
física que hace tanta falta en México.
Pero es importante porque nos da la oportunidad de dudar de
lo que creemos.
Y e importante porque desafía a las personas.
Es un juego rudo afuera y adentro. Adentro lo saben las
jugadoras y lo disfrutan los espectadores.
Afuera de la cancha, el football bikini desafía lo que
creemos.
Es muy, muy, muy rudo y emocionante.
Y lo que
falta por saber
Todavía falta tratar la parte empresarial del football
bikini: cómo se organizan coches y empresarios para sacarlo adelante. Falta
también la parte deportiva: cómo entrenan, las peculiaridades en reglas y en
desarrollo físico de las deportistas. Hay que hablar de cómo ayuda y de cómo
puede ayudar a la cultura del deporte. Hay que hablar más de las jugadoras: de
sus verdaderos motivos y metas. Y la historia de este deporte en México, que es
distinta del de los Estados Unidos.
Coaches y administradores me han ayudado con información.
Varias jugadoras me han ayudado respondido encuestas y entrevistas en línea.
Falta contactar a directivos de ligas para ampliar y
profundizar la información.
NOTA:
(2) foto 9 NOVIEMBRE, 2015DONJOSELUISVARELA
(3) Female swimmer is disqualified over her bathing suit.
Critics cite body shaming / High School Swimmer Breckynn Willis Disqualified
Because Of How Swimsuit Fit Her Body